En 2019, Räsänen cuestionó el apoyo de su iglesia al evento LGBTQ Helsinki Pride con un pasaje bíblico
Fuente: El Debate
21/11/2023
La parlamentaria finlandesa Päivi Räsänen ha sido absuelta en un caso de 'delito de odio' relacionado con comentarios sobre la comunidad LGBT.
Räsänen, exlíder de los Demócratas Cristianos de Finlandia y ministra del Interior entre 2011 y 2015, enfrentó acusaciones por incitación contra un grupo minoritario en tres ocasiones.
Entre ellas, se incluye un panfleto escrito en 2004 para su iglesia titulado Hombre y Mujer los Creó, en el que describía la homosexualidad como un «trastorno del desarrollo psicosexual», y un tuit de 2019 en el que cuestionaba el patrocinio de su iglesia al Helsinki Pride, acompañado de un pasaje bíblico.
La fiscalía finlandesa argumentó que las declaraciones de Räsänen excedían los límites de la libertad de expresión. Sin embargo, un Tribunal de Distrito falló a favor de Räsänen en 2022, decisión que fue apelada por la fiscalía ante el Tribunal de Apelaciones.
Este último ratificó la decisión del Tribunal de Distrito, afirmando no ver razón para juzgar el caso de manera diferente. Räsänen, absuelta de todos los cargos, explicó a El Debate como afectó esta situación a su perspectiva sobre libertad religiosa.
–¿Ve esta decisión judicial como una victoria para la libertad religiosa y la libertad de expresión, especialmente para los cristianos en la esfera pública?
–El Tribunal de Apelación de Helsinki dictaminó por unanimidad que todos los cargos contra mí han sido desestimados. La sentencia es de suma importancia. Me siento aliviada, feliz y agradecida por ella. El fallo del Tribunal es un paso importante hacia adelante para la libertad de religión de los cristianos que creen en la Biblia, pero también para la libertad de expresión de manera más amplia y en general. La libertad de expresión es un derecho fundamental en un estado democrático.
–¿Cuán importante es, en su opinión, que los políticos y figuras públicas hablen abiertamente y compartan sus perspectivas bíblicas sobre cuestiones sociales contemporáneas?
–Es muy importante y animo firmemente a otros a continuar ejerciendo estos derechos fundamentales. El público y los votantes también tienen derecho a conocer los valores y visiones del mundo de aquellos que los representan. Es crucial para todos los cristianos hablar abiertamente sobre Jesucristo y su mensaje escrito en la Biblia, la sagrada palabra de Dios.
–¿Cómo ha influenciado esta batalla legal de cuatro años su compromiso con la expresión de valores cristianos en el ámbito político?
–Este proceso ha reforzado mi confianza en la guía de Dios. He vivido este proceso en defensa de la libertad de expresión y la libertad religiosa de muchas maneras como una alegría, un privilegio y una tarea honorable. He tenido muchas oportunidades de testificar sobre el evangelio, sobre Jesús, frente a la policía, los jueces y los medios de comunicación de una manera que nunca habría ocurrido sin estos cargos.
Por supuesto, este proceso de casi cinco años de investigaciones, declaraciones falsas sobre mis opiniones y juicios ha consumido una enorme cantidad de mi tiempo, y también ha creado autocensura en nuestra sociedad.
–¿Qué mensaje tiene para sus seguidores, que comparten sus puntos de vista sobre las enseñanzas de la Biblia en relación con la sexualidad y el matrimonio?
–Estoy muy agradecida a todas las personas que me han apoyado durante este largo proceso. Lamentablemente, la actitud general hacia el cristianismo y los valores conservadores se está volviendo cada vez más hostil en Europa. La ruptura de la visión del mundo cristiano es visible ya sea en cuanto a la protección de la vida en su inicio o en su final o en la defensa del matrimonio como una unión entre hombre y mujer.
Siempre he enfatizado que todas las personas son creadas a imagen de Dios y todas son iguales. Independientemente de las características de la persona, el valor humano es absoluto. Sin embargo, la enseñanza de la Biblia es clara en que el matrimonio es una unión entre hombre y mujer y que practicar la homosexualidad va en contra de la voluntad de Dios. Niego categóricamente que mi pensamiento o escritura puedan ser discursos de odio o difamación o calumnia de minorías. Las enseñanzas sobre el matrimonio y la sexualidad en la Biblia surgen del amor, no del odio. Espero que los cristianos no tengan miedo de hablar.
–¿Cómo cree que las sociedades deberían equilibrar el derecho a la libertad de expresión religiosa con los derechos de los grupos minoritarios, incluida la comunidad LGBT?
– Creo que todas las personas, también la comunidad LGBT, tienen derecho a escuchar la verdad bíblica y el Evangelio completo. En cuanto a las leyes de «discurso de odio», creo que la ley debería preocuparse por las personas que incitan a otros a cometer violencia u otros crímenes, pero el discurso que ciertas personas pueden encontrar insultante u ofensivo no debería ser criminalizado. La libertad de expresión y la libertad de religión son derechos fundamentales garantizados por todos los principales tratados de derechos humanos.
–Dada la posibilidad de futuros desafíos legales, ¿cuáles son sus preocupaciones o esperanzas para el futuro de la expresión religiosa en la política y la vida pública?
–Espero que el fiscal esté satisfecho con la decisión, pero si no, estoy lista para defender la libertad de expresión y religión también ante el Tribunal Supremo de Finlandia, y si es necesario, incluso ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Espero que los cristianos no tengan miedo de hablar durante estos tiempos difíciles y que mi caso establezca un precedente positivo para el futuro respecto a los cristianos y su derecho a expresar su fe en público.
–¿Qué consejo daría a sus compañeros cristianos que deseen expresar sus puntos de vista basados en la fe en debates públicos, especialmente en temas políticamente sensibles?
–Estos tiempos nos desafían a tener un profundo compromiso con la Biblia. Es importante que los cristianos tengan la libertad de enseñar y hablar sobre la Sagrada Palabra de Dios también en aquellos momentos en que el cristianismo y los valores que derivan de él van contra la corriente. Si ahora no usamos nuestro derecho a hablar libremente, el espacio para usar nuestros derechos eventualmente se reducirá aún más.
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