Iglesia de Burgos renueva su compromiso con “los anhelos y preocupaciones del mundo obrero”

Fuente:   Noticias Obreras

Abraham Canales

31 enero 2022

 

“Tenemos que luchar por un trabajo digno para todos”, exhortan en el comunicado del encuentro diocesano de Pastoral Obrera de Burgos.

La Iglesia de Burgos ha conmemorado este sábado sus treinta años de escucha al mundo obrero. El encuentro reunió a cristianas y cristianos comprometidos en esta pastoral, “experiencia de lucha, de denuncia, de esperanza”, para poner en valor esta historia de comunión desarrollada con el esfuerzo de tantos personas militante implicados en “construir el Reino de Dios en el mundo del trabajo”.

“Queremos que esa memoria nos impulse con más energía hacia adelante. Tenemos que seguir proclamando que la persona es lo primero. Tenemos que luchar por un trabajo digno para todos”, apuntan en su comunicado.

En este contexto, intervinieron quienes han sido responsables diocesanos de esta pastoral en la diócesis (Gregorio Burgos, Javier García Cadiñanos, Fernando García Cadiñanos, —actual obispo de Mondoñedo-Ferrol que lo hizo con un mensaje en vídeo–, Mariano López Melero y Sagrario Villanueva) para relatar su experiencia y animar a los militantes, movimientos especializados y equipos parroquiales a seguir siendo una “Iglesia que escucha al mundo obrero”.

Iglesia que renueva su compromiso con “los anhelos y preocupaciones del mundo obrero” en un panorama poco alentador, según la realidad de paro, pobreza, exclusión y temporalidad compartida en el encuentro, pero también con la mirada puesta en los distintos signos de esperanza que permiten proteger el empleo (con la aprobación de los ERTE hasta el 28 de febrero); la reforma laboral que tiene el acuerdo de todas las partes “¡todas, empresarios, sindicatos y gobierno!” o el acuerdo que permite mantener el convenio de la Junta de Castilla y León con el hospital San Juan de Dios de Burgos.

 

Acompañar a los trabajadores y reclamar sus justas reivindicaciones

En este tiempo de sombras e incertidumbres, “en una sociedad rota por el individualismo”, manifiestan que la Pastoral Obrera “es más necesaria que nunca” para hacer presente “la esperanza de Jesucristo. Pero sobre todo y muy especialmente, porque somos los enviados de la Iglesia para escuchar los anhelos y preocupaciones del mundo obrero. Una escucha atenta para sentir su sufrimiento como nuestro, para acompañar la vida de los trabajadores y sus familias y para reclamar sus justas reivindicaciones”, indican.

Una pastoral que se renueva en actitudes, acciones y lugares donde estar presentes, tendiendo puentes y fomentando el diálogo para seguir dando “testimonio fiel del Evangelio y encarnarnos con humildad en el mundo convulso del trabajo” debido a un “sistema económico donde impera la injusticia”, queremos ser denuncia y esperanza”, subrayan.

Para Amaya Muñoz, actual delegada de Pastoral Obrera, es necesario que la Iglesia siga escuchando al mundo obrero porque “la precariedad y la injusticia hacen sufrir a muchas personas; donde la conciliación con la familia parece misión imposible y donde las condiciones de trabajo y sueldo están generando nuevos pobres”. Según incide, “la Iglesia debe escuchar al mundo del trabajo no solo para transmitir esa esperanza del evangelio que es tan necesaria hoy, sino sobre todo y especialmente, para descubrir a Cristo en el parado, en la familia que no llega a fin de mes, en el trabajador que sufre la explotación». «Cristo nos interpela en estas personas y pone a prueba la coherencia de nuestra fe», según declaraciones recogidas en la web diocesana.