A quién
Pues a Dios, que no rechaza ni los gritos cifrados en hablas blasfemas, y que las escucha incluso, procedentes del sufrimiento, como oración. A Dios y a todo dios: los que así se viven desde el poder que ejercen; los que actúan como tales desde la conciencia de ser poseedores de la verdad…; y todo ser suelto con ganas de hacer.
Sobre qué
¿Y carta sobre qué? A cuenta de una de las urgencias actuales.
Millones de viviendas vacías. Una, a pocos metros de donde ahora mismo estás, estés donde estés. ¿Cómo es posible?
¿Qué?
Lo que este mismo año ha sucedido en nuestra ciudad: que una persona humana pase el día sin techo, y duerma en la calle, y en ella muera…
No hay un solo perro o perra a la que en Bilbao pueda ocurrirle eso. Al ser humano sí, por el lobo de su hermano.
La otra cara de la moneda
Mazarredo 22 cerrado. Por el Ayuntamiento. Porque no es invierno.
Imagínese por un momento el alcalde salir del hospital y, por no ser invierno, pasar el día entero en la calle, y dormir bajo el cielo, y no tener salud, y no contar con ningún recurso que no sea de urgencia, y tener que pasarlo solo, oscamente solo, sin más calor que el del frío ni más compañía que la de ojos huidizos? ¿Se lo imagina?
Y hay otros recursos, sí, muchos…; sí, pero, siendo necesario y posible, no Mazarredo.
¿Y el obispo?
Vaya por delante que muchas casas parroquiales de Bizkaia están habitadas por familias sin recursos ni techo. Y que personas sin techo han dormido en templos, y en el mismo obispado.
Ahora bien, tras la carta de cuaresma y pascua, del Obispo a las comunidades, el Foro de Curas de Bizkaia envió e hizo pública una triple propuesta al Obispo, como signo visible de una aplicación concreta de la carta pastoral.
Él, en entrevista pública, no evitó menospreciar la propuesta. ¿Cómo? Negando sentido estratégico a la primera parte, y silenciando las otras dos, al menos tal como se transmitió la rueda de prensa en los medios públicos.
Para qué
¿Y todo este rollo para qué?
No tan rollo, que más de uno suele empezar leyendo por el final.
¿Para qué? Para formular una propuesta, por aquello de “ninguna protesta sin propuesta”.
En un momento en que
1. Casi todos hablan del necesario decrecimiento;
2. Y no pocos lo reclaman aplicándolo a banalidades e infraestructuras de la iglesia;
3. Cuando el orden político y económico niega a los pobres lo que facilita a los ricos;
4. Y el Ayuntamiento de Bilbao deja sin uso y cierra el albergue de invierno;
PROPUESTA: Comencemos a decrecer como iglesia en cuanto a inmuebles. Sobran para sus funciones actuales templos. Convirtamos en Bilbao un templo en vivero de templos, gran habitación de los ya habitados por Dios, los sin techo.
No faltará a la llamada de la urgencia un tropel de voluntarios y voluntarias, una de las riquezas de las sociedades tanto religiosa como civil de nuestros tiempos.
Disculpas
Perdón. Sí, es verdad, a veces los charlatanes no hacemos más que desgastar las palabras y sembrar semillas híbridas.
Pero reconozcan, tampoco esto ocurriría si todos a una echáramos la mano al mismo arado.
Bilbao, 24 de mayo de 2013
Txelis
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