El primero de los datos es que, en esa búsqueda o posibilidad de decidirse por un Seminario interdiocesano, D. M. Asurmendi ofreció a las Diócesis de Bilbao y Donostia el Seminario Diocesano de Vitoria-Gasteiz como la sede de dicho Seminario Interdiocesano.
El segundo de los datos hace referencia a la propia Facultad de Teología. El Obispo de Vitoria ofreció a los Obispos de Bilbao y Donostia un gobierno colegiado de la misma en la forma que se estimara más procedente a la vez que respetuosa con sus estatutos.Acompañando a estos dos datos, se nos envía también una breve consideración en varios puntos:
1. La respuesta recibida por los Obispos de Bilbao y S. Sebastián es de sobra conocida. La colegialidad episcopal y la interdiocesanidad nunca ha conocido momentos tan críticos.
2. La facultad de Teología en su sede de Vitoria-Gasteiz reúne en este momento para la docencia y la investigación profesores procedentes de las Diócesis de Vitoria-Gasteiz, Donostia, Bilbao, Pamplona, Burgos, Logroño y Santander. Es, además, un espacio de contrastada y respetuosa pluralidad teológica en fidelidad al Vaticano II
3. Desatender las propuestas del obispo de Vitoria es apostar por una estrategia de descapitalizacion teológica de las tres diócesis
4. No trasladar o no informar a los diferentes consejos diocesanos de estas propuestas, dar la callada por respuesta y activar la estrategia en curso [de manera burda por el obispo de S. Sebastián y más refinada por el de Bilbao] compromete seriamente el futuro de cada diócesis, la interdiocesanidad y, sobre todo, la comunión por parte de quienes tienen la misión eclesial de preservarla y, si es el caso, de incrementarla.
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