Alemania: por una sinodalidad permanente

Fuente:   Settimana News

Por:    Marcello Neri

11/09/2022

Los trabajos de la IV Asamblea del Camino Sinodal de la Iglesia católica alemana finalizaron ayer en Frankfurt. Tras el rechazo del texto base sobre la sexualidad, se han aprobado definitivamente documentos importantes para el catolicismo alemán, que luego desembocarán en la contribución de esta Iglesia local al proceso sinodal más amplio en el que se encuentra actualmente la Iglesia católica bajo el liderazgo del Papa Francisco. .

Entre éstas, también las orientaciones prácticas en el campo de la sexualidad humana y las relaciones afectivas (en las que se destaca la importancia de una nueva visión del amor entre personas del mismo sexo).

Se aprobó el texto sobre el papel de la mujer en la Iglesia Católica, que abre con un pedido al Papa Francisco para que evalúe la posibilidad de un ministerio sacramental de la mujer en la Iglesia.

Aun sin el carácter de una constricción jurídica en cuanto a su implementación en las diócesis individuales, dejando así a cada obispo la decisión de proceder en esta dirección también en su Iglesia, la Asamblea aprobó las orientaciones prácticas elaboradas por el primer Foro "Poder y división de los poderes en la Iglesia - Participación común en el mandato misionero”.

Estos sientan las bases para el establecimiento, a nivel de la Iglesia alemana, de un Consejo Sinodal permanente compuesto por representantes del cuerpo episcopal, sacerdotes y laicos - una expresión compartida de la necesidad de hacer de la sinodalidad la forma permanente de la convención de la Iglesia católica alemana.

El Consejo sinodal, hacia el que camina esta Iglesia, debe convertirse en un lugar de discusión, discernimiento y decisión común para las orientaciones básicas a nivel pastoral y de gestión económica. Además, también representa una instancia de verificación del camino y las prácticas de la Iglesia alemana.

Mons. Bätzing, presidente de la Conferencia Episcopal y copresidente del Camino Sinodal, respondiendo a las críticas expresadas por algunos obispos que se quejaban de la falta de un debate previo suficiente y profundo en la sede sinodal, señaló que estos los cohermanos no han aprovechado las oportunidades que ofrece la estructuración global del Camino Sinodal de la Iglesia alemana. Como, por ejemplo, en el trabajo de los Foros, en los momentos de confrontación y debate y en las fases de consulta de las asambleas previas. Todos los momentos pretendían reunir la pluralidad de voces del catolicismo alemán, para luego hacerlas converger en los textos básicos y las orientaciones prácticas que luego votarían.

El momento crítico del rechazo del texto base sobre la sexualidad, que podría haber llevado al fracaso de la dinámica sinodal, resultó ser un relanzamiento de la misma. Queda, por supuesto, la desilusión y las heridas que ha causado este paso, especialmente entre quienes viven situaciones de vida que aquel documento pretendía albergar dentro de la experiencia eclesial.

A pesar de ello, la práctica sinodal de la Iglesia alemana ha demostrado que es posible integrar y elaborar en ella incluso momentos como el vivido el pasado jueves por la tarde.

Un ejemplo de cómo la sinodalidad sólo puede aprenderse practicándola - y sólo donde hay una voluntad compartida y común de encontrarse todos en ella más allá de cuáles son las posiciones de principio de los individuos: precisamente como lugar propicio para darles una voz que pide ser debidamente oído y debidamente reconocido.