Fuente: La Croix International
Por Alexis Buisson
Estados Unidos
15/11/2022
Durante la Asamblea General de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos en Baltimore, Maryland, el 16 de noviembre de 2021. (Foto de KEVIN LAMARQUE / REUTERS)
Los sacerdotes católicos estadounidenses tienen poca confianza en sus obispos. Ese es uno de los hallazgos del "Estudio Nacional de Sacerdotes Católicos", un documentode 25 páginas publicado el mes pasado en el período previo a la asamblea general de esta semana de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB).
Según esta encuesta de 10.000 presbíteros en todo el país realizada por el "Proyecto Católico" – una iniciativa de la Universidad Católica de América – menos de la mitad de los encuestados diocesanos (49%, frente al 63% en 2001) tienen "mucha" o "alguna" confianza en sus líderes, y sólo el 24% tiene confianza en "obispos en general".
Mientras que el 92% de los obispos que fueron interrogados dicen que ayudarían a sus sacerdotes en caso de dificultades personales, solo el 36% de los sacerdotes creen que sus superiores realmente lo harían. Colocan a los obispos en la parte inferior de su círculo de apoyo, después de los feligreses, familiares y otros sacerdotes.
La desconfianza es particularmente evidente en el manejo de las acusaciones de abuso sexual. Mientras que el 82% de los sacerdotes dicen que tienen "miedo regular de ser blanco de acusaciones falsas", el 51% dice que sus superiores los apoyarán en estas situaciones y el 36% dice que su diócesis les dará los recursos para defenderse en los tribunales, por ejemplo.
"Capas de burocracia"
"Los sacerdotes sienten que hay capas de burocracia entre ellos y sus líderes, y que no están tratando con seres humanos. Sienten que los obispos quieren ascender en la escalera y están más preocupados por proteger a su diócesis que a sus sacerdotes", dijo Brandon Vaidyanathan, uno de los autores del informe. Dijo que el clericalismo, un tema que "surgió repetidamente" de aquellos a quienes entrevistó, es responsable de esta crisis de confianza, más que la reciente disensión política vinculada a los debates sobre la concesión de la comunión a Joe Biden y otros funcionarios electos que están a favor de legalizar el aborto.
El padre Greg Barras, un sacerdote retirado de la diócesis de Biloxi, Mississippi, está de acuerdo. Barras, quien es presidente de la Asociación de Sacerdotes Católicos de Estados Unidos (AUSCP), dijo que muchos líderes de la Iglesia son "más hombres corporativos que hombres de Francisco".
"El Papa nos invita a crecer abordando cuestiones de racismo, sexismo y clericalismo, y a mirar el lugar de la homosexualidad dentro de la Iglesia. Pero muchos obispos estadounidenses, que se oponen a él, se comportan con una mentalidad corporativa. Prefieren barrer el polvo debajo de la alfombra. Y si los sacerdotes no están de acuerdo, son castigados", dijo.
Barras dijo que tal comportamiento complica los esfuerzos para integrar a los clérigos que han venido del extranjero para compensar la caída en las vocaciones sacerdotales en todo Estados Unidos. "En mi diócesis, dos tercios de los sacerdotes no son de los Estados Unidos, pero no han sido entrenados en la cultura de la Iglesia estadounidense", señaló. "Depende de los obispos ayudarnos a ser mejores líderes. En este momento, los sacerdotes se sienten aislados".
Vaidyanathan, el investigador del "Proyecto Católico", dijo que los niveles de confianza varían ampliamente de una diócesis a otra, datos que no puede compartir con “La Croix” por razones de confidencialidad. Cuando se les preguntó sobre el estudio, los funcionarios de la USCCB se negaron a responder.
Los esfuerzos simples serían suficientes
Según la encuesta, el 77% de los sacerdotes diocesanos fueron reportados como "prósperas", según una evaluación que mide la salud mental y física, la felicidad y la realización profesional.
"A nivel individual, a los sacerdotes les está yendo muy bien. Pero hay una desconexión entre sus vidas personales y sus relaciones con su diócesis y su obispo. Esto no es saludable", advirtió Vaidyanathan. Muchos le dijeron que los esfuerzos simples mejorarían las relaciones, como la posibilidad de reuniones informales con su obispo, tener su número de teléfono celular, recibir una llamada telefónica en su cumpleaños.
"La falta de accesibilidad puede llevar a que algunos problemas como el alcoholismo u otros abusos permanezcan en las sombras", concluyó el investigador. "Los sacerdotes más jóvenes reportan niveles más altos de agotamiento. El apoyo episcopal es esencial para el futuro del ministerio y para permitir que los laicos y los sacerdotes prosperen.
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