Luis Argüello: “¿Un colegio o una televisión son católicos porque sean propiedad de la Iglesia y tengan un ideario católico? No”

El presidente de los obispos españoles reflexiona en Cáceres sobre la necesidad de contratar a cristianos “confesantes” en las obras apostólicas

Fuente:    Vida Nueva Digital

Por   Elena Magariños

14/01/2025

La educación católica y el testimonio de fe en los medios de comunicación es uno de los “grandes” desafíos que atraviesa la Iglesia en la actualidad. Así lo reconocía el presidente de los obispos españoles, Luis Argüello, durante su intervención el pasado 9 de enero en la conferencia ‘Actualidad y retos de la Iglesia española’, que tuvo lugar en el Seminario Mayor Diocesano de Cáceres el pasado 9 de enero.

Reconociendo la dificultad, ante las nuevas tecnologías y formas de acceder a la información y el entretenimiento que trae consigo la gestión de un medio de comunicación, Argüello ha recordado que “tanto en la escuela católica como en los medios hacen falta cristianos confesantes”, ya que, actualmente, “las instituciones confesionales hoy significan poco”.

“Un colegio es confesional porque tiene un ideario católico. ¿Y qué? podríamos decir en la práctica”, ha aseverado el obispo. “¿Una televisión es católica porque sea propiedad de la Iglesia y tenga un ideario católico? No”. Por ello, ha apuntalado que “necesitamos profesionales confesantes”.

Esto, además, es “un gran desafío no solo en el ámbito empresarial, sino por ejemplo en una organización tan grande para la Iglesia como es Cáritas, donde hay muchas personas que trabajan con contrato”. “¿Todas las personas que trabajan con contrato en Cáritas se identifiquen con lo que es la Iglesia? No”, ha señalado Argüello. “Y se precisa que algunos, ojalá que muchos de los trabajadores de Cáritas sean confesantes”.

 

Una salida del clericalismo

Ante ello, el prelado ha apuntado que “tenemos una dificultad que sí que es una salida del clericalismo: habiendo pensado que la Iglesia fundamentalmente son los curas, los frailes y las monjas, la vida laical, que es una vida de estar en medio del mundo ganándose la vida a través de un salario justo, una actividad empresarial o una iniciativa de cualquier tipo… conjugar esto desde una realidad vocacional, es una novedad grande”.

En cuanto a la educación, ha explicado que, si bien la escuela católica en España “ha estado sostenida, fundamentalmente, por instituciones religiosas que fundaron colegios durante el siglo XVIII, XIX y parte del siglo XX”, hoy muchas de esas instituciones “apenas tienen presencia en sus propias escuelas, de las que siguen siendo titulares y que gestionan a través de una fundación educativa”. “¿Qué es lo decisivo para que esa escuela siga siendo católica? No que haya clase de religión, que por supuesto, sino que en las otras asignaturas un profesor confesante dé esa mirada a la biología, a la historia, a la filosofía, y una forma de relacionarse con los alumnos que incorpore una novedad”, ha explicado Argüello.

“Ese es el gran desafío de la escuela católica, y de la presencia de católicos en la escuela estatal”, ha apuntado, subrayando que “pública es tanto la estatal como la concertada”. “No nos dejemos comer el lenguaje. La escuela concertada es una escuela pública que acepta la ley de educación para bien y para mal, y se financia con fondos públicos, y está en el espacio público”, ha insistido. “Es pública, pero no de iniciativa estatal, sino social. Y la iniciativa social y estatal se encuentran en el espacio público: es de todos”.