sábado, 15 de noviembre de 2025

Vivienda en alquiler asequible: QUERER ES PODER

Fuente:   Blog de J. Madrazo


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En la actualidad coinciden los debates sobre dos Planes Directores de Vivienda; el estatal y el propio de Euskadi. 

Por sorprendente que parezca, el Gobierno del Estado todavía anda planteando a las CCAA que la vivienda protegida no se pueda vender en el mercado libre pasado un tiempo. Y es que la mayoría de gobiernos autonómicos, aún permiten que estas viviendas, puestas en marcha con el esfuerzo de toda la ciudadanía, pasen al mercado libre al cabo de unos pocos años. Así nunca se podrá fortalecer un parque de vivienda de precio asequible y alternativo al mercado libre. Mercado que ha demostrado su incapacidad para garantizar el derecho a la vivienda a la mayoría de la población ya que únicamente se mueve con una lógica especulativa.

Esta misma cuestión ya fue superada en Euskadi, de forma pionera, hace 22 años, cuando aprobamos la calificación permanente para todas las viviendas protegidas, fuera quien fuera el promotor. 

Como consecuencia de ello, en la actualidad, 70.000 viviendas en Euskadi ya están calificadas como protegidas de por vida. Si a este parque de viviendas protegidas en venta, le sumamos las viviendas libres que se ofertan en régimen de alquiler asequible por los Ayuntamientos y por BIZIGUNE, programa que pusimos en marcha en el 2005, más los Alojamientos Dotacionales, que aprobamos en el 2006 con la ley vasca del suelo, podemos concluir que en Euskadi el parque de viviendas principales excluido del mercado libre puede alcanzar el 7,78%; un porcentaje nada desdeñable ya que duplica la media estatal.

Aunque de esta cifra, sólo el 3% del parque de viviendas principales se ofrece en régimen de alquiler asequible; muy alejado del 20% que suele fijarse como de umbral mínimo para poder tener una cierta influencia en el mercado. Consciente de ello, el Pacto Social de Vivienda de Euskadi ha establecido que en el plazo de diez años (2036) este porcentaje alcance el 5% del parque de viviendas principales. Este objetivo implica casi duplicar en diez años todo lo que se ha hecho en los veinte años anteriores. Cuando menos, ambicioso, pero no imposible si se adoptaran las medidas adecuadas.

Tras haber transcurrido más de veinte años desde que muchos jóvenes entraron a vivir en viviendas protegidas, no es para nada descartable que algunos deseen vender las mismas al Gobierno Vasco para poderse comprar ahora una vivienda en el mercado libre (por haber mejorado su situación económica o por necesidad de más espacio). 

Esto ofrece una oportunidad de intervención al Gobierno Vasco, que no debería desaprovechar, de ir adquiriendo progresivamente estas viviendas protegidas, por sí mismo o con colaboración de otros agentes sociales, para engrosar el parque de vivienda en régimen de alquiler asequible. 

Si hemos sido capaces de movilizar viviendas libres al régimen de alquiler asequible mediante el programa BIZIGUNE, más sencillo resulta movilizar, a ese mismo fin, viviendas protegidas calificadas como tales de forma permanente.

¿Por qué el gobierno PNV-PSE no está hablando de esta posibilidad?

En primer lugar, porque la compra de vivienda VPO para el alquiler no es una política que estimula al sector promotor inmobiliario, que tan abducido tiene al Ejecutivo Vasco. La segunda, porque no dedican los recursos necesarios para afrontar la inversión que reclamaría esta compra progresiva de vivienda.

Por el contrario, promueven una reforma legal que deja más dudas que certezas, para que el Gobierno Vasco obtenga suelo de forma directa, al margen de los convenios con Ayuntamientos, pero a cargo de los mismos desarrollos urbanísticos.

Esta forma de actuar no va a generar más suelo para vivienda protegida. Y mucho menos, va a permitir disponer de forma inmediata de estas viviendas de alquiler asequible. La construcción de nuevas viviendas protegidas y de nuevos alojamientos dotacionales reclama unos tiempos de los que no disponemos. 

Atender una emergencia habitacional, como la que nos está indicando el Plan Director de Vivienda, exige movilizar las viviendas protegidas ya existentes hacia el régimen del alquiler asequible. La solución no pasa exclusivamente por construir sino por movilizar y captar. Y ahí tenemos la oportunidad de las 70.000 viviendas protegidas ya existentes para poder intervenir desde lo público en favor del alquiler asequible de forma rápida y eficaz, actuando de forma directa o bien concertada con terceros promotores sociales. 

Es más fácil echar la culpa de la insuficiencia de los parques públicos de vivienda en alquiler a los Ayuntamientos, que tienen su cuota de responsabilidad, antes que asumir la que le corresponde al Gobierno Vasco por su dejación en materia de planificación sectorial y por renunciar a la acción pública directa en favor de la vivienda protegida en alquiler.

Es urgente colocar la apuesta por la vivienda asequible a la altura de preocupación de la ciudadanía. Para ello es imprescindible incrementar, hasta duplicar, la dotación presupuestaria en materia de vivienda, situándola, al menos, en el 1% del PIB. 

Y es que el problema de acceso a la vivienda en Euskadi precisa de realidades y no de debates estériles y tramposos. 

13 de Noviembre de 2025

JAVIER MADRAZO LAVÍN 

 

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