Carta a los
representantes políticos
recientemente
elegidos.
JOSAN MONTULL
Respetables señores ediles:
Reciban de entrada un saludo y una felicitación por su elección popular
para ser representantes del pueblo en Ayuntamientos, Diputaciones y Organismos
administrativos de carácter autonómico. Saberse votado por el pueblo soberano
es, a la vez que una satisfacción, una gran responsabilidad.
Lo cierto es que ha pasado más de un mes desde las elecciones que les
dieron los votos suficientes para gobernar. Hacía mucho tiempo que un
plebiscito no suscitaba en mí tanta expectación. Tal vez, la aparición pública
de los casos de corrupción de algunos políticos y la posibilidad del fin del
bipartidismo alentaron en mí un interés que ya casi había perdido.
Si bien me parece una osadía por mi parte, me atrevo a escribirles a
ustedes para hacerles llegar una serie de recomendaciones o peticiones para que
las consideren si lo creen oportuno. Tengo que confesarles que a mí
personalmente no me gusta que nadie me dé consejos; pero lo de ustedes es
diferente, en tanto en cuanto les hemos votado nosotros; eso nos da el mismo derecho
a sugerirles lo que creemos mejor para el pueblo. Por eso me atrevo a hablarles
y darles estos diez puntos de reflexión.
1- Combatan la
corrupción con todas sus fuerzas. Hagan todo lo posible para que nadie se
enriquezca con el dinero ajeno aprovechando puestos de privilegio que tienen
ciertos cargos. Para dar credibilidad a su lucha contra la corrupción, no
deberían limitarse a no subirse el sueldo, deberían, si lo consideran oportuno,
bajárselo –aunque fuera muy poco-, sería ése un signo de buena voluntad de
acercamiento a los que les han votado.