viernes, 7 de junio de 2024

El Papa pide que para el Jubileo se cancele o se reduzca la deuda externa

Francisco pide que actuemos todos juntos en la construcción responsable de nuestra casa Común. Lo pidió a los participantes del encuentro organizado por la Pontificia Academia para las Ciencias con el tema: “Abordando la crisis de deuda en el Sur Global”.

Fuente:   Vatican News

Por   Patricia Ynestroza - Ciudad del Vaticano

05/06/2024


Niños en Madagascar sufriendo el hambre

Francisco, al encontrarse con los participantes en el encuentro sobre la crisis de deuda en el sur global, organizada por la Pontificia Academia para las Ciencias ha invitado a los presentes a soñar y actuar en la construcción responsable de nuestra casa común;

“nadie puede habitarla con tranquilidad de conciencia cuando sabe que a su alrededor hay multitud de hermanos con hambre y también sumergidos en la exclusión social y en la vulnerabilidad. Dejar pasar esto es pecado, pecado humano, aunque uno no tenga fe, es un pecado social”

 

Cancelar o reducir la deuda externa

Y siguiendo el magisterio de sus antecesores, como lo hizo Juan Pablo II en el Jubileo del 2000, pidió que se condonara la deuda externa en los países del sur del mundo o al menos reducirla. Francisco se hizo eco de este llamado, “hoy más urgente que nunca, teniendo presente que la deuda ecológica y la deuda externa son dos caras de una misma moneda que hipoteca el futuro”.

“El Año Santo de 2025 al que nos encaminamos nos llama a abrir la mente y el corazón para ser capaces de desatar los nudos de esos lazos que estrangulan el presente, sin olvidar que somos sólo custodios y administradores, y no patrones”

Es indispensable afirmó, obrar de buena fe y con verdad, siguiendo un código de conducta internacional con normas de valor ético que tutele las negociaciones. Pensando en una “nueva arquitectura financiera internacional que sea audaz y creativa”.

 

Una financiación con responsabilidad compartida

Francisco recordó que, a los pueblos del sur, les sirve el tipo de financiación que implica una responsabilidad compartida entre quien la recibe y quien la otorga. El beneficio que pueda aportar a una sociedad depende de sus condiciones, de cómo se use y de los marcos en los que se resuelvan las crisis de las deudas que puedan producirse, señaló.

Después de tantos estragos: una globalización mal administrada, la pandemia y las guerras, el Papa dijo que la humanidad se encuentra frente a una crisis de deudas que afectan principalmente a los países del sur del mundo, generando miseria y angustia, y despojando a millones de personas de la posibilidad de un futuro digno. En consecuencia, dijo, ningún gobierno puede exigir moralmente a su pueblo que sufra privaciones incompatibles con la dignidad humana.

“Para tratar de romper el círculo financiamiento-deuda sería necesaria la creación de un mecanismo multinacional, basado en la solidaridad y la armonía de los pueblos, que tenga en cuenta el sentido global del problema y sus implicaciones económicas, financieras y sociales. La ausencia de este mecanismo favorece el “sálvese quien pueda”, donde pierden siempre los más débiles”

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Identifícate con tu e-mail para poder moderar los comentarios.
Eskerrik asko.