Ginebra: el Estado desautorizado por haber prohibido una procesión

Fuente:   cath.ch

Por   Raphaël Zbinden

03/04/2023

La Sala Administrativa del Tribunal de Justicia de Ginebra ha rechazado una decisión del Departamento de Seguridad (DSPS), que había prohibido una procesión de Corpus Christi en la ciudad, en junio de 2022. El tribunal dictaminó que esta medida violaba la libertad religiosa.

Una parroquia de la Fraternidad Sacerdotal de San Pío X (FSSPX), separada de Roma desde 1988, con sede en Carouge, había solicitado permiso para organizar una procesión del Corpus Christi por cuatro calles. Se esperaba que entre 100 y 300 personas honraran esta antigua tradición católica.

Sin embargo, el DSPS había rechazado la manifestación pocos días antes de que estuviera programada para el 16 de junio de 2022. Según el departamento de Ginebra, la procesión no solo era un homenaje a la divinidad, sino que tenía como objetivo exhibir este tributo a los demás. Esto fue, según el DSPS, un grave ataque a la libertad y los derechos de los demás y a la neutralidad religiosa del dominio público. La parroquia recurrió esta decisión ante la Sala Administrativa del Tribunal de Justicia.

 

Conflictos sobre el laicismo

En una sentencia hecha pública el 31 de marzo de 2023, el organismo concluyó que la denegación de autorización violó el principio de proporcionalidad y en el proceso, la libertad de conciencia y creencia de los apelantes, informa el ATS. "El riesgo para el interés público era tan bajo como la restricción de la libertad de los apelantes era significativa", señaló la Cámara.

El caso se refiere a otros conflictos en Ginebra relacionados con el secularismo. El 10 de enero de 2023, la misma Sala Administrativa rechazó las dos iglesias evangélicas que apelaron contra la decisión del cantón de Ginebra de rechazar los bautismos en el lago Lemán.

Una diferencia notable distingue estas situaciones, señala el diario 20 Minutos: las iglesias rechazadas antes de Navidad no habían firmado la declaración en la que se comprometen a respetar los derechos fundamentales. La ley de laicidad, votada en 2019 por los ginebrinos, exige dicha firma para acceder al estatus de organización que mantiene relaciones con el Estado, lo que abre entre otras cosas la posibilidad de solicitar autorizaciones. Sin embargo, la comunidad que acaba de ser fallada a favor por los tribunales ha rubricado la declaración.

 (cath.ch/ats/20min/rz)