Bendición de parejas del mismo sexo: el "no" de los obispos africanos

El jueves 11 de enero, las Iglesias de África publicaron una declaración conjunta en la que anunciaban su oposición a la bendición de las parejas en situación irregular. ¿Esta posición disonante con la declaración vaticana presagia una Iglesia cuya pastoral es de geometría variable?

Fuente:   International.la-croix

Por Loup Besmond de Senneville con Héloïse de Neuville

12 de enero de 2024

Por Peter Hermes Furian.@Adobe Stock

Los sacerdotes no bendecirán a las parejas del mismo sexo en África. La declaración se publicó el jueves 11 de enero. En un documento de cinco páginas titulado Fiducia supplicans, todos los obispos africanos, a través de la organización que los representa, han dado un "no" explícito a la autorización dada por el Vaticano a mediados de diciembre para bendecir a las parejas del mismo sexo.

El texto, firmado por el cardenal Fridolin Ambongo, arzobispo de Kinshasa (República Democrática del Congo) y presidente del Simposio de Conferencias Episcopales de África y Madagascar (Sceam), afirma que tales bendiciones -autorizadas fuera del marco litúrgico- "no pueden tener lugar en África sin exponernos al escándalo". Esta organización, que reúne a los líderes católicos del continente, lanzó a finales de diciembre de 2023 una consulta a todos los obispos africanos. Se trataba de organizar una respuesta concertada tras las fuertes reacciones iniciales de algunas conferencias episcopales ante Fiducia supplicans.

"Los obispos africanos no consideramos apropiado bendecir en África uniones homosexuales o parejas del mismo sexo porque, en nuestro contexto, esto causaría confusión y estaría en contradicción directa con el ethos cultural de las comunidades africanas", continua el cardenal Ambongo. "El lenguaje de Fiducia supplicans sigue siendo demasiado sutil para que lo entienda la gente sencilla".

Este mensaje del Sceam constituye un precedente histórico en la historia de la Iglesia. Nunca antes todos los obispos de un continente se habían distanciado públicamente de este modo de una instrucción romana. A algunos les basta con decir que la imagen misma del papa se ha debilitado.

 

"Vamos hacia una forma de descentralización"

En Roma, el Dicasterio para la Doctrina de la Fe no previó tales reacciones cuando publicó Fiducia supplicans unos días antes de Navidad. "Este texto fue publicado por el cardenal Fernández (prefecto del dicasterio, n.d.r.) y un equipo muy reducido", afirma una fuente vaticana. Otra explica que ni los prefectos de los demás dicasterios de la curia romana, ni los cardenales, ni los presidentes de las conferencias episcopales fueron informados del texto, a pesar de su carácter altamente sensible.

Era una forma de evitar filtraciones y un posible bloqueo del texto... pero también representaba un riesgo en cuanto a su recepción. De hecho, las críticas y los cuestionamientos fueron tan fuertes que Roma se vio obligada a publicar una "nota explicativa", dejando en última instancia libertad a los obispos locales para aplicar el texto como considerasen oportuno.

La declaración de los obispos africanos es, por tanto, un paso lógico, y algunos en el Vaticano no dudan en verla como una expresión de la sinodalidad deseada por el propio papa. De hecho, durante la primera Asamblea General del Sínodo en octubre, varios participantes de África se opusieron a cualquier bendición de parejas homosexuales y compararon la cuestión con una preocupación ideológica occidental, o incluso con una forma de nueva "colonización".