Declaraciones del obispo emérito de Machala sobre la situación en Ecuador

En la víspera de la Jornada Mundial de la Oración por el Cuidado de la Creación

Fuente:   Bizkeliza

31/08//2023

Encuentro de Mons. Herrera con el obispo de Bilbao

El obispo emérito de Machala (Ecuador) Mons. Néstor Herrera, se ha reencontrado hoy con el obispo de Bilbao, con quien coincidió en el tiempo en el que el prelado bilbaíno estuvo de misionero en el país latinoamericano. Estos días, Monseñor Herrera, ha querido visitar a algunos misioneros y misioneras vascos a los que conoció cuando ejerció de obispo. Hoy, tras pasar por Berriz y Urkiola, ha llegado al Obispado de Bilbao al mediodía, acompañado por el sacerdote misionero Juan Carlos Pinedo y Fran Izquierdo, Director de Misiones Diocesanas Vascas de Vitoria. Aprovechando su presencia, le hemos cuestionado sobre diversos aspectos de la actualidad.

La visita del obispo emérito de Machala (Ecuador) a Bizkaia, es una buena oportunidad para preguntarle en torno a algunos temas que son noticia. Su opinión sobre el fruto de las Misiones Diocesanas Vascas en su país, el escenario que se dibuja tras la primera vuelta de las elecciones, la situación de los pueblos amazónicos… Temas interesantes a los que responde desde una mirada poliédrica y sobre los que ha podido conversar en el diálogo que ha mantenido esta mañana con el obispo de Bilbao.

¿Cuál es la situación actual de la Misión Vasca en Ecuador?

La misión sigue, sobre todo con seglares. Agradecemos sobre todo la semilla que pusieron las Misiones Diocesanas Vascas en los lugares donde estuvieron. Vemos que fue una siembra muy buena porque sigue dando frutos. Creo que eso durará por mucho tiempo, porque lo que han sembrado en las personas mientras la edad no los lleve a la tumba, se seguirá trabajando en esa línea y con esos mismos ideales.

 

¿El país vive con miedo e inseguridad?

El miedo ha impactado mucho entre nosotros durante esta campaña política. Hasta ahora, no vivíamos con inseguridad. Se comentaba más en torno a las guerrillas de Colombia o del Perú, con Sendero Luminoso. Pero ahora, lo estamos viviendo en carne propia y eso ha sido terrible.

 

¿Cuál es el escenario que se vislumbra?

Estamos a la expectativa de la segunda vuelta, que se realizará el 15 de octubre. Hay dos candidatos, una mujer que está patrocinada por el partido de Correa y un joven, hijo de un empresario poderoso, pero que ha calado bastante bien entre la juventud. Creemos que los jóvenes le respaldarán y también los partidos que no consiguieron votos para aspirar a esta segunda vuelta. Con todas sus limitaciones, pero al menos, esto disipa el temor a un Gobierno presidido por Correa.

 

¿Puede cambiar algo la situación de las clases más desfavorecidas con un nuevo Gobierno?

Creo que sí, porque hay una orientación social bastante fuerte. Los políticos se han dado cuenta de que, ya no pueden gobernar con una autoridad vertical, sino que tienen que socializar muchas cosas para que surtan efecto y tengan acogida y respaldo. Antes imponían y el que no cumplía era sancionado. Hoy, la gente se revela. Lo mismo en la Iglesia llamada a la sinodalidad, que debe escuchar a la gente y tener diálogos sobre algunos aspectos que son vitales.

En esta primera vuelta se realizó una consulta en torno a seguir explotando petróleo en una amplia extensión de bosques con biodiversidad y con mucha fauna. Se cuestionó también sobre la conveniencia de seguir explotando la minería a cielo abierto o hacerlo con técnicas modernas, donde se cuide más la contaminación del agua.

 

Mañana, se celebra la Jornada Mundial de la Oración por el Cuidado de la Creación ¿Algún mensaje?

Mucho se ha hablado en la primera campaña de elecciones y los criterios han estado bastante contrapuestos. Algunas personas han defendido que se siga explotando el petróleo, porque la compañías han puesto mucho empeño en evitar la contaminación del agua. Aun cuando los gases siguen saliendo por los conductos aéreos y eso genera enfermedades, sobre todo, se cree que son portadores de cáncer. Esta situación ha puesto en tela de juicio si conviene seguir con las extracciones o no. Por otra parte, otras personas consideran que no se debe seguir explotando, porque las reservas son muy pequeñas y que no es verdad lo que se calcula que recibiría el estado de beneficio económico. Últimamente el barril está a 60 dólares, pero Ecuador recibe como máximo 22-23 dólares.

 

¿Revierte algo en los habitantes de la Amazonía?

Algunos reconocen que, para la salud primaria, las compañías aportan en las localidades donde están asentadas, pero no hay una política general al respecto y es lo que la gente reclama.

Esperemos que, por la tranquilidad de la gente, cambie la situación.