Vuelco electoral #28M

El Partido Popular ha protagonizado un vuelco en las elecciones municipales del #28M. Gana al PSOE, segunda fuerza política más votada, por cerca de 750.000 votos. El PP recuperan seis comunidades autónomas. La abstención (36,09%) ha subido 1,29 puntos respecto a 2019 (34,80%).

Fuente:    Noticias Obreras

29/05/2023

FOTO | Vía EFE

El nuevo mapa político es un gran triunfo del presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo y le coloca en una gran situación para disputar la presidencia a Pedro Sánchez en las generales de dentro de 6 meses.

El jefe del Ejecutivo, por su parte, tendrá que reorientar su estrategia tras el fracaso de la campaña, mientras que Vox se ha convertido en imprescindible para que los populares gobiernen en muchas plazas. Ciudadanos desaparece y Podemos y Sumar ha sufrido una grave derrota.

Pedro Sánchez sale debilitado de estos comicios para encarar las elecciones generales. Intentó una campaña de anuncios que posteriormente aprobaba en el Consejo de Ministros, para medirse con el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, quien había ido subiendo en las encuestas desde que accedió a la presidencia del PP.

Pero el resultado no ha sido el que esperaba y ha perdido feudos importantes, entre ellos, la joya de la corona, la Comunidad Valenciana, además de Aragón, Baleares, La Rioja y el probablemente menos esperado de todos, el Gobierno de Extremadura.

A ellos es previsible que se sume el de Canarias, ya que Coalición Canaria suma tanto con PSOE como con PP para gobernar y su presidente Fernando Clavijo, ya ha proclamado que Canarias “quiere cambio”. En Navarra los socialistas han mantenido los apoyos pero ha subido Bildu y bajado Geroa Bai, con los que se tendrá que entender para formar gobierno.

De los barones del PSOE que se han examinado hoy el único que ha resistido ha sido el presidente de Castilla La Mancha, Emiliano García Page, uno de los que más se había opuesto al desembarco de Sánchez en su territorio y más ha criticado los pactos con Bildu y con los independentistas. Hoy, algunos líderes lamentaban que la campaña se haya convertido en nacional.

El PSOE no se ha dejado solo el Gobierno de al menos cinco comunidades autónomas, sino que su poder municipal se ha visto seriamente tocado, tras perder las municipales. Ha caído a segundo lugar con 413.236 votos menos que hace cuatro años (con el 99,84 por ciento escrutado) y no ha logrado ser primera fuerza en Barcelona, ciudad que ambicionaba y en la que se ha volcado Pedro Sánchez, además de perder las alcaldías de Sevilla, Palma y Valladolid, entre otras.