Francisco expresa su "vergüenza" por los abusos de la Iglesia en los internados y anuncia un viaje a Canadá en verano
Fuente: La Vanguardia
Por: Anna Buj
Ciudad del Vaticano. Corresponsal
01/04/2022
Francisco ha recibido hoy a una delegación de 200 representantes de las comunidades indígenas canadienses
VATICAN MEDIA HANDOUT / EFE
El papa Francisco ha perdido perdón este viernes a los pueblos indígenas canadienses por los abusos que sufrieron a manos de la Iglesia católica en los internados donde eran encerrados con el único objetivo de suprimir su identidad cultural. En un paso definido como “histórico” por los representantes de estas minorías que han viajado a Roma para relatarle sus experiencias, el Pontífice ha asegurado sentir “indignación y vergüenza” por las políticas de asimilación que tanto dolor causaron a estas comunidades.
El Papa se une así a las disculpas que ya expresó la Conferencia Episcopal de Canadá por estos graves abusos cometidos en unos centros escolares que funcionaron entre 1831 y 1996. Más de 150.000 niños fueron obligados a separarse de sus padres para acudir a unas 130 residencias escolares financiadas por el Estado y gestionadas por organizaciones religiosas, donde se cometían abusos físicos y sexuales constantemente y los estudiantes eran golpeados por hablar sus lenguas. Estos abusos, según sus líderes, son vistos como una de las causas de las grandes tasas de adicción al alcohol y a las drogas entre estas comunidades, que hoy en día representan un 5% del total de la población canadiense.
Se estima que por lo menos 4.000 menores murieron durante sus estancias en estos internados, y fueron enterrados en tumbas sin nombre sin avisar a sus padres. La tragedia fue revivida el año pasado al descubrirse los restos de 215 niños en una antigua residencia de Kamloops Indian Residential School, en la provincia de la Columbia Británica, que fue cerrada en 1978.
En una audiencia privada para 200 representantes de los pueblos originarios de Canadá, inuits, métis y “first nations”, Francisco les ha asegurado que volverá a pedir perdón en un viaje a Canadá este mismo verano, en torno a la fiesta de Santa Ana, el 26 de julio, muy venerada por los católicos en el país. “No vendré en invierno”, ha bromeado.
"Me uno a los hermanos obispos canadienses a la hora de pediros perdón", dice Francisco
Durante toda esta semana, supervivientes de estos internados han relatado al Pontífice las torturas y comportamientos discriminatorios que vivieron en estos centros, que les han comportado traumas intergeneracionales. Según les ha dicho Bergoglio, todo esto le ha suscitado “indignación”, pero también “dolor y vergüenza”, a causa “del papel que varios católicos, en particular con responsabilidades educativas”, han tenido en los abusos y en la falta de respeto hacia su identidad, cultura y valores espirituales.
“Todo esto va contra el Evangelio –ha remarcado–. Por la deplorable conducta de esos miembros de la Iglesia católica pido perdón a Dios y quiero deciros, de todo corazón: estoy muy dolido. Y me uno a los hermanos obispos canadienses a la hora de pediros perdón”.
La representante de la comunidad métis, Cassidy Caron, ha agradecido unas palabras “históricas” y “necesarias”. En uno de los encuentros le regalaron al papa argentino unos mocasines como los que llevaban los niños arrancados de los brazos de sus padres para ir a los internados, pero de su propio número. Francisco confirma así otro viaje en un verano que será para él ajetreado, después de haber anunciado ya que visitará República Democrática del Congo y Sudán del Sur a principios de julio.
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