200 «necesitados» invitados a comer por el Arzobispo

Fuente:   Canal 54

28 julio 2021

 

La Fundación VIII Centenario, esa que preside el arzobispo de Burgos Mario Iceta y vicepresidente el ex presidiario Antonio Miguel Méndez Pozo, ha invitado a comer MAÑANA jueves a las 14 horas en el Restaurante del Hostal Landa alrededor de 200 personas. Entre los invitados se encuentran Concejales, Autoridades, Empresarios y todo tipo de jerifaltes a quienes nada parece preocupar la situación de Burgos por la Covid-19, ni mucho menos la recomendación  general a las autoridades competentes de evitar la celebración de eventos multitudinarios.

Desde luego la celebración de una comida para 200 personas es, en este momento un insulto y una demostración de imprudencia, prepotencia y chulería del organizador de la misma. Pero también es una muestra de desprecio hacia la sociedad burgalesa de quienes acuden a esta comilona.

Este nuevo modo de actuar del Arzobispo de Burgos de Méndez Pozo y de su Fundación VIII Centenario, lo único que demuestra es una prepotencia y falta de responsabilidad indigna de un representante de la iglesia ante el pueblo cristiano.

El Arzobispo Iceta que ya tuvo que «salir por pies» de Córdoba donde fue presidente de la comisión de inversiones de  Caja Sur (ver: El obispo de Bilbao, sancionado con 30.000 euros por la gestión de CajaSur (eldiario.es)  y Bilbao, y al paso que va también podría hacerlo de Burgos, está dispuesto a pisotear el catecismo, la Biblia y las enseñanzas de Jesucristo sin que sepamos dónde le lleva ese camino.

Por mucho que efectivamente se lleve a cabo la actividad señalada cumpliendo con las medidas sanitarias previstas para la celebración de eventos en restaurantes, lo que no es moral, ni éticamente aceptable es que la Fundación que preside el Arzobispo de Burgos Mario Iceta organice este tipo de eventos en este momento, haciendo gala de manifiesta ostentosidad, en uno de los mejores y más caros restaurantes de Burgos e invitando a comer cientos de «estómagos agradecidos» que por dignidad, y porque a buen seguro no lo necesitan, deberían declinar dicha invitación.

Seguro que sólo algunos políticos y otros «muertos de hambre», estarán deseando acudir para reír las gracias, aunque lo mejor sería que los que pretendan acudir donen el importe del cubierto al Banco de Alimentos, Cáritas, o a cualquiera de las decenas de asociaciones que trabajan en Burgos en favor de los necesitados.