Presentación del libro Las palabras vivas de Lamet sobre Juan, el evangelista de fina ironia y mayor fe. Nada como el original, descarte imitaciones.
Pedro Miguel Lamet
¿Qué sintió Juan, el discípulo amado durante la última cena, cuando
reclinó su cabeza en el pecho de Jesús? A esta pregunta intenta
responder Pedro Miguel Lamet en este intenso y emocionado libro.
Basándose en los escritos joánicos, a medio camino entre la
reconstrucción literaria, el comentario exegético y un pequeño tratado
de espiritualidad, el autor, en línea con su anterior obra Las palabras calladas
de María de Nazaret, se adentra en la conciencia y los recuerdos del
más místico de los evangelistas, que, retirado en la isla de Pátmos,
escribe en primera persona un relato a la vez ameno y profundo a
partir de sus palabras más queridas: la barca, la luz, el agua, la
vida, la mujer, la madre, el trueno…
El resultado es una obra al mismo tiempo rigurosa y poética,
fundamentada en los mejores comentaristas, que puede ayudar a la
meditación y quizás a exclamar con el discípulo predilecto: “Podía oír
las palabras, contemplar los gestos; pero mi alma volaba alto en
volandas de un amor sin medida, fundido como hierro con fuego, gota en
el mar, lluvia en la tierra, lejos de todo y cerca de nada, arrebatado
por el compás ardiente de aquel infinito corazón de amigo”.
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Eskerrik asko.